En la actualidad nos podemos
dar cuenta que la mayoría de los padres le inculcan a uno desde pequeño la
importancia de estudiar, para ser alguien en la vida, y obtener grandes cosas
porque el estudio le abre muchas puertas a uno.
Pero de lo que no nos damos cuenta es la calidad de la educación del día
de hoy, no pensamos si es adecuada o no, anteriormente todo lo que se aprendía
en la escuela era lo que se necesitaba para lo largo de la vida.
Hoy en día estamos siendo
educados para algo totalmente diferente por lo cual está pasando el mundo,
podemos darnos cuenta que muchas personas bien educadas están pasando por las
mismas dificultades económicas por las que pasan personas con menor educación. De
igual manera no podemos medir el éxito de una persona con unas calificaciones,
la educación es muy importante y en ella hay que tener en cuenta si de verdad
nos preparan para lo que necesitamos.
La educación la podemos
identificar en dos fases que es en la educación escolar y profesional, en la
escolar es aprender a escribir, leer, hacer
ejercicios matemático, y en la profesional es para convertirse en doctor,
abogado, para obtener un título y de ahí ganar dinero desempeñando lo que
“aprendimos”. Lo que es importante
aprender y enseñar es la educación financiera ya que es importante para que el
dinero de uno gane en la profesión ejercida se vuelva una riqueza para toda la
vida y así mismo nos brinde seguridad financiera.
Todos las personas tenemos
diferentes formas de ver, identificar y reconocer las cosas que nos rodean, en
este caso aportamos el mismo pensamiento solo que lo aplicamos de diferente
forma como el del padre rico y padre pobre, ya que dan a entender que un niño
aprende a ser pobre y aprende a crecer creyéndose menos inteligente que lo
demás, la labor de los maestros debería ser sacar el talento con el que cada
niño nace y así poderse enfocar en ese. De esta misma manera debemos aprender a
ser discretos, amables con los demás así quieran sobrepasar porque la única
forma en la que podemos demostrar lo que somos es haciendo no diciendo. Como
sociedad hay que ser más inteligentes a la hora de mostrar nuestras fortalezas
y debilidades, de esa forma asumiremos
las cosas correctamente, para no seguir generando esa violencia entre nosotros
mismos, hay que ser inteligente con nuestra información y emociones.
Cuando estamos en el colegio
siempre destacan a algún estudiante y lo premian de alguna forma, porque tienen
un coeficiente intelectual diferente a los demás, pero lo que pasa es que todos
tenemos un coeficiente intelectual diferente porque nos destacamos y nos gusta
diversas cosas, no todos demuestran y expresan lo que saben de la misma forma,
mediante esto podemos reconocer los siete diferente tipos de inteligencias que
nos exponen en el libro que son; verbal-lingüística, numérica, espacial,
física, intrapersonal, interpersonal y ambiental, todos no tenemos las mismas
siempre nos destacamos por una, usualmente las personas se rinden al ver que
quizás no están en un contexto social donde ellos se destacan, lo que pasa es
que hay que tener paciencia para cuando llegue el momentos de demostrar lo que
sabemos, hay que llenarnos de valor, coraje para así aprender más de lo que nos
gusta y de lo que no entendemos, no todos tenemos el mismo ritmo de aprender,
comprender las cosas, hay que hacerlo a nuestro propio ritmo.
Hay que tener en cuenta que
no siempre necesitamos dinero para ganar dinero, porque “el dinero proviene de
sus ideas simplemente porque el dinero es tan solo una idea”, es tan solo una
idea y en ocasiones creemos que lo es todo, debemos ganar es poder sobre él y
no dejar que él nos maneje, controle. Hay que llenarnos de pensamientos ricos,
enriquecidos, siempre que vayamos hacer algo hay que saber, que el dinero
trabaja para nosotros, y hay que transmitir esos conocimientos porque si nos
quedamos en la idea de trabajar para el dinero nos quedaremos encerramos sin
buscar salida alguna, los padres nos dan poder de conocimiento a nosotros
obteniendo diversas percepciones positivas para la vida.
Muchas
veces las personas fracasan por no obtener alguna fórmula ganadora, porque
creen que al haber obtenido un buen desempeño en la escuela no necesitaran de
ellas, la idea de estas fórmulas es ayudarnos a ganar el juego de la vida. Hay
tres tipos de fórmulas que son; de aprendizaje, profesional y financiera. Hay
que mantener la confianza en nosotros mismos, creer en lo que hacemos, no dudar
en nosotros mismos, dejar los malos pensamientos a un lado, siempre hay que
mirar más allá de lo que siempre nos muestran. Las formulas desarrollarlas, en
la escuela, universidad, trabajo hay que empezar a desarrollarlas desde la casa
y como dicen sus dos padres la verdadera educación comienza cuando abandonamos
la escuela y nos enfrentamos al mundo real.
En
la vida cotidiana los padres quieren que sus hijos estudien, obtengan cualquier
título y trabajen en algo estable, ya que esa idea es algo inapropiada para lo
que es verdad se debe hacer. En la era industrial alguien “viejo” era muy
valioso, pero para la actualidad alguien “viejo” ya no tiene valor de nada, no
sirve, por eso mismo hay que aprender de las fórmulas para asumir los cambios
que vienen, porque siempre se hacen cambios en la vida no nos podemos
acostumbrar a una sola cosa o idea. Muchas veces las personas se creen mejores
que otras al obtener buenas calificaciones en el colegio, el futuro le
pertenece a aquel niño que tenga la mejor fórmula ganadora de aprendizaje y
haga cosas diferentes, y se impresione a sí mismo. Hay que aprender a cambiar y
adoptarse a todos los cambios y decisiones que se tomen, ya que en las escuelas
no enseñan eso.
Cuando
estamos en el colegio veíamos diversas materias, y siempre nos decíamos o
preguntábamos para que nos dictan eso si nunca lo vamos a ejercer o utilizar y
de ellas depender, para salir con un diploma de bachiller, y esta tan
manipulado nuestros pensamientos que lo seguimos haciendo porque creemos que
sin eso no obtendremos un trabajo estable. La idea tampoco es dejar de estudiar lo que
pasa es que la forma de enseñar en los colegios es mala, el sistema de
educación de hoy en día es muy malo. Lo
ideal es que los padres supervisaran, guiaran y cuidaran la percepción de los
hijos.
Debemos reconocer que a
nuestro banquero no le interesa que tan inteligente era en la escuela, a él le
interesa es que tan inteligente soy en el punto de vista financiero. No siempre
el dinero por si solo nos vuelve rico, tampoco tener un trabajo estable y
confiable nos aseguran, la forma correcta de aprender es que el aprendizaje
fuera divertido, haciendo juegos permitiendo que los niños expongan sus ideas y
pensamientos, haciendo las cosas interesantes, pero siempre enfocándolo a la
realidad. El dinero es solo juego y hay que divertirse mientras se juega. Hay
que tener disciplina financiera, hay que tener en cuenta que tan rápido se
mueve el dinero y que tan duro trabajar para nosotros. Debemos aprender
habilidades básicas de la deuda y el manejo de ella, hay que hacer el mayor
esfuerzo para trabajar duro, ahorrar y salir de esas deudas. Alguien con un
coeficiente intelectual financiero alto, será capaz de controlar las deudas en las que se encuentra,
reconociendo los gastos buenos y malos.
Las personas están siendo
programadas para ser un trabajador duro en vez de un hombre rico que sabe que
su dinero trabaja para él. No siempre
debemos hacer lo mismo de siempre o lo mismo que los demás porque creemos que a
ellos les va bien, hay veces pasamos por situaciones en las que cometemos
muchos errores y creemos que es malo y no es así porque estamos aprendiendo de
ellos, y ya sabemos que no debemos volver hacer. Los juegos son grandes formas
de aprendizaje porque proporcionan un nuevo vocabulario financiero. Hay que
tener cuidado con lo que decimos, expresamos frente a las demás personas porque
lo pueden mal interpretar, entre más gente ayudemos más rico seremos.
Todos aprendemos de manera
diferente y hacemos las cosas de diversas formas. Muchos de nosotros sabemos
que deberíamos hacer, pero preferimos hacer cosas que no nos gustan, hay que
buscar cada estilo e aprendizaje que nos gusta y ver su lado bueno para hacer
las cosas que nos gusta y nos nace, hay que buscar muchas opciones de esa forma
tendremos grandes oportunidades de éxito, no hay que limitar las cosas hay que
hacerlas y aprender de ellas, nos podemos dar cuenta de la importancia de la
educación al observa la totalidad de los estados financieros.
En el interior de cada niño
vive un pequeño genio, no siempre será lo que los demás buscan, pero él siempre
se mantendrá porque sabe que le gusta y que quiere hacer, ese genio de cada uno
es lo que le da magia a nuestros días, a nuestra vida, es el que nos da ánimos de seguir aprendiendo y buscando
diferentes cosas que nos aporten a nuestros conocimientos y vida, para así
cuando en un futuro tengamos un familia podamos enseñarles a nuestros hijos
todo lo que hemos aprendido y vivido.
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